La sensación de levantar
el teléfono y que no tenga tono, es la misma que abrir un pote de helado
creyendo que encontrarás helado y resultas que es el agua de cogollo de mango
que le recetaron echarse fría en las coyunturas a tu abuela y se le congeló.
Uno busca un poco de
estima preguntándole al teléfono, ¿quién es la persona más valiosa para mí? Y
que éste te responda “TU TU TU TU TU TU TU…”, y eso no ocurre porque no hay
señal. La tasa de deprimidos aumenta gracias a que quienes dirigen CANTV,
sirven menos que la línea.
Y ni hablar de la Internet
que o no hay, o es lenta, o viene 10 minutos y se va 20 horas. Ese es un
derecho humano que nos violan, porque esa es la visión de la izquierda, sí lo
tiene, quíteselo y viólelo por recto…digo, por portarse derecho.
No, no es adrenalina que
llegue la señal, parezca estable, hagas una transferencia bancaria y ¡PUM!,
ésta no salga; igual en los lugares donde tienen puntos, que en plena
transacción se caiga, te descuenten, no aparezca reflejada y no te quede más
dinero para pagar el producto, bien o servicio, todo porque a la señal le
pareció gracioso dejarte guindando. ¡Dígame sí estás enviando bitcoin y no sale
y sí se debita!, así comienzan los suicidios en masa.
Sabemos que alejarse un
rato de la Internet es obligatorio y más para convivir, pero entienden, los que
estamos siempre en Internet, ¡ES QUE YA DE ANTES NO TENÍAMOS CON QUIÉN CONVIVIR
Y COMENZAMOS A CONVIVIR CON LA GENTE QUE ESTÁ EN INTERNET!; también ocurre que
sí tenemos con quién convivir, ya se fastidió y le preocupa que no haya
Internet a dónde mandarnos a estar y más que por el cariño que aún nos tienen,
no pueden mandarnos para la verga.
Ese limbo está unido a la
falla de Internet, que como dijimos es un Derecho Humano que no quiere aplicar
en Venezuela, salvo que apliques la etiqueta del día para adular al régimen de
nicolás maduro a cambio de un almuerzo, que es lo máximo que se puede conseguir
con lo que da de bonos el régimen.
Bueno, exagero como la
mentada banda ancha de ABA CANTV, no dan ni para un almuerzo. Y ni comerse un
cable uno puede, porque los cables se los están robando para alejarnos más
comunicacionalmente y no los reponen porque para que exista una guerra
económica ficticia, deben existir víctimas verdaderas, ustedes y yo.
Ahora, las agencias de
loterías cierran por no tener señal telefónica o de Internet de CANTV para
transmitir los números comprados y pagados. ¿Qué será de la vida de los viejos
que van a ver sí levantan o se les levanta con una taquillera?, ¿hasta cuándo
podrán soportar las ancianas con los sostenes llenos de billetes que no gastan
en cosas que necesitan sino que buscan doblarlos en las agencias, terminan
dobladas ellas?, ¿de qué vivirán muchos vagos que sólo juegan Parlay?,
¡responde CANTV!
En conclusión, mientras sigan
los mismos en Miraflores, el teléfono que es una necesidad como dijo Popy, no
repicará; de seguir desunido todo aquel que sea opositor, así sea su plan de
trabajo, la Internet no navegará, sino que seguirá en su naufragio.
Un país que no se
comunica, no sabe estar preparado ni sabe corregir lo dañado.
Y sí, no tener señal de
Internet o no poder llamar a un ser querido por CANTV, atrae lágrimas que son
muy mala señal, como CANTV.
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