Existe en el predio de la publicidad un montón de frases que además de atraer, terminan confundiendo. Esa que coloqué en el título es una de ellas, ya que lo que es un prototipo no queda tan claro como suelen pintarlo.
Me explico a ver si me entienden y luego me explican a mí porque tampoco estoy muy claro. Hay comerciales para televisión sobre moda masculina que te indican tendencias y que esas son las que marcan al prototipo del hombre moderno, en las cuales vemos a un hombre pálido, caminando como que si no le importa su vida y además errático ya que no sabe a dónde va, usando unas bermudas de colores hechas con hojas de palma, sandalias multicolores, una franela color tornasol o lo que quiera que se sea eso y un aro salvavidas amarillo con forma de pato.
Entonces uno se pregunta si uno es un prototipo de
un náufrago que se hizo un pantalón de hojas ya que no le gustaban las faldas,
se le decoloró la franela, los zapatos le quedaron en la pura suela y además
llegó de carambola a una isla perdida porque no sabía nadar, pero flotando con
un pato, se salvó de chiripa y ahora es el eslabón perdido entre Robinson
Crusoe y Robin Williams en Jumanji.
Bueno, según una extensa investigación de 3,7
segundos en Google, un prototipo es algo que está poniendo a prueba algo antes
de que la edición definitiva salga por completo. Es lo que llaman en
tecnología, un BETA. Es más o menos eso, de todas maneras investiguen, no les
voy a durar toda la vida, sino 53 años más desde el día que lean esto.
De esa manera se hacen prototipos de automóviles,
casas automatizadas, tesis de grado, equipos electrodomésticos, cohetes, estadio
y no sé qué más porque ya me da miedo pensar que todo esto sea ensayo y error y nos metan a nosotros en el ensayo.
Pero volviendo al principio, esto del prototipo del
hombre de hoy, que requiere una colonia comprada a la orilla de una playa en
Grecia, montando luego un Ferrari, con una mujer espectacular al lado vestida
de blanco pero que no sonríe, dirigiéndose a un castillo donde viven solos y
entiendes que la mujer no sonríe porque es la que debe limpiar ese lugar y él
se pone la colonia porque el castillo huele a humedad y está próximo a vender
el carro para pagar el castillo que él pensó estaría lleno de turistas,
poseyendo así un estilo de vida elegante y nutrido por grandes historias
contadas una y otra vez a los visitantes, la verdad que no sé dónde me perdí,
pero ese no es el prototipo de vida que yo quisiera tener.
Claro, comer perros calientes de un dólar como
almuerzo siempre e ir de pie en el transporte público tampoco es el prototipo
de vida que quiero, más es la que me espera como recurrente si no pongo más de
mi parte y dejo de estar creyendo el prototipo de vida que los comerciales dan
y comienzo a vivir la vida tal cual me debo para bien y dignidad ahora y
siempre, ya que la misma es un ratico y no admite más versión BETA que de los 0
a los 17 años, cuando uno por error, desea ser adulto y se termina viviendo una
vida a lo VHS, por las ganas que se tiene siempre de rebobinar la cinta.
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